19/11/2021 / Exitosa Noticias / Edic. impresa / Actualizado al 09/01/2023
La enfermedad inflamatoria intestinal (EII), que engloba la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn, es una patología que produce inflamación en varias partes del tubo digestivo, causando diversos síntomas tales como dolor abdominal, diarrea, fatiga, disminución de apetito y pérdida de peso.
En los últimos años, ha habido importantes avances en el tratamiento de la EII gracias al desarrollo de las terapias biológicas, medicamentos producidos por organismos vivos, que han logrado mejorar la calidad de vida y cambiar la manera de cómo se maneja la enfermedad.
También puedes leer: Te enseñamos a prevenir y tratar los calambres en el cuerpo
Al respecto el Dr. Juan Paredes, médico gastroenterólogo y presidente de la Asociación Para el Estudio de las Enfermedades del Intestino (ASPEIN), señala que hace 20 años, 4 de cada 10 pacientes debían someterse a una operación del intestino para poder manejar la EII. “Hoy con los medicamentos biológicos, solo 2 de cada 10 pacientes necesitan ese tipo de cirugía, haciendo una diferencia significativa en la calidad de vida de los pacientes”, indica.
“Si bien la EII no tiene cura, las terapias biológicas tienen una alta tasa de efectividad: entre 50% y 80% de pacientes que son tratados con ellas logran reducir los principales síntomas de la enfermedad, disminuyen la inflamación en las células y eliminan las heridas de la pared del intestino”, precisa.
También puedes leer: Complicaciones frecuentes en bebés prematuros
El Dr. Paredes destaca la importancia del diagnóstico temprano para lograr mejores resultados para el paciente. “Con el seguimiento y control continuo de sus síntomas, así como la personalización de las terapias de acuerdo al perfil del paciente y de sus necesidades, es posible controlar la enfermedad y brindar bienestar continuo”, señala.