30/08/2021 / Exitosa Noticias / Edic. impresa / Actualizado al 09/01/2023
El principal desafío de un paciente asmático es mantener el control de su enfermedad, ya que en tiempos de pandemia sus exacerbaciones (llamadas también ataques o crisis asmáticas), que se caracterizan por presentar tos y dificultad para respirar, pueden ser confundidas como síntomas de COVID-19.
◼ ¿Qué es el asma?
Se trata de una enfermedad respiratoria no transmisible, y se caracteriza por presentar falta de aire (disnea) y sonido silbante en el pecho. Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, las personas con asma pueden tener un mayor riesgo de enfermarse con el SARS-CoV-2.
También puedes leer: Siete claves a tener en cuenta para afiliarse a una EPS
Frente a ese peligro, los pacientes deben tener un adecuado control de su enfermedad y los síntomas que esta desencadena, como tos seca y dificultad para respirar. Es esencial continuar con su tratamiento de forma diaria según la prescripción médica, pues no existe ninguna indicación de que deban suspenderlo si llegasen a contraer el virus.
◼ Claves de cuidado:
Para lograr un adecuado control de los síntomas, el paciente debe:
Identificar aquellos factores desencadenantes y evitarlos.
Utilizar su medicación permanentemente como le fue prescrita, esto lo ayudará a tener una vida libre de síntomas.
Llevar su inhalador de rescate y utilizarlo de manera adecuada.
Mantenerse activo y comer bien.
También puedes leer: Todo sobre las variantes del COVID-19 y la coinfección
Ante el avance de la COVID-19 y sus variantes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda a los pacientes asmáticos:
Asegurar su dotación de medicamentos.
Tomar precauciones diarias como el correcto lavado de manos, uso de mascarilla y distanciamiento social.
En el caso de tener en casa a un familiar enfermo, permanecer alejados para evitar la propagación del virus.