Charly García dejó el escenario a mitad de show
Charly García dio una hora de recital impecable y digno de pasar al recuerdo, pero se retiró abruptamente, todos creyeron que era un intervalo, esperaron con paciencia durante 50 minutos, y cuando volvió fue para hacer un tema al piano y no regresar jamás.
Es evidente que ser desconcertante está en su naturaleza y que no cambiará. Porque Charly ha sido capaz de iniciar un show dos, tres y hasta ocho horas tarde. También ha cancelado conciertos sin previo aviso, con toda la gente en la sala. Todo eso es parte del mito que lo precede, y nadie se sorprende ni protesta.
La noche del miércoles, un Luna Park totalmente lleno aguardó con buen humor y paciencia infinita su vuelta al escenario, apenas matizando cada 15-20 minutos con un grito de “¡Olé olé olé, Char-ly, Char-ly!” para recordarle que estaban ahí.
La espera parecía haber valido la pena, porque cuando regresó se sentó al piano y se animó a la difícil 'Desarma y sangra'. Fue ovacionado de manera extraordinaria, pero al finalizar el tema dijo “Bueno, ahora chiques a sus casas” y dejó a todos con cara de sorpresa e incredulidad.