11/11/2021 / Exitosa Noticias / Cultural / Actualizado al 09/01/2023
El fascinante jaguar y la majestuosa águila arpía son dos de las especies más emblemáticas amenazadas por la destrucción acelerada de la Amazonía, cuya impresionante biodiversidad corre riesgo de desaparecer a medida que la selva se acerca a un “punto de inflexión”.
Esas son las conclusiones del biólogo Fernando Tortato, experto en jaguares amazónicos del Gran Pantanal, en el suroeste de Brasil, y del conservacionista, Roberto Eduardo Stofel, quien recorre el norte de la Amazonia brasileña en busca de nidos de águila arpía.
También puedes leer: La fatalidad como marca de vida en cinco historias
Según los científicos, hay un círculo vicioso de deforestación, incendios forestales y cambio climático que podría dañar y secar la selva tropical más grande del mundo hasta convertirla en sabana. Las consecuencias serían catastróficas para sus más de tres millones de especies de plantas y animales.
◼ Ríos voladores
La destrucción del Pantanal, que se extiende hasta Bolivia y Paraguay, explica Tortato, afectaría al ecosistema de 390 mil millones de árboles de la selva que generan un vapor de agua que provee lluvias a gran parte de América del Sur, un fenómeno conocido como “ríos voladores”.
A veces aparecen como espirales de niebla que surcan el cielo y luego se juntan en nubes gigantes que parecen corrientes de algodón. Estos “ríos” probablemente transporten más agua que el río Amazonas, según los científicos. Por la deforestación, “la lluvia que normalmente llegaría al Pantanal a través de los 'ríos voladores' ha disminuido”, dice Tortato.
◼ Amenazados
Clasificado como “casi amenazado”, el jaguar, el mayor felino de América, y se estima que su población disminuyó entre 20 y 25% en los últimos 20 años. Es crucial proteger la biodiversidad amenazada de la Amazonía, y no solo por el bien de las plantas y los animales, dice Cristiane Mazzetti, de Greenpeace.
La compleja red de la naturaleza desempeña un papel esencial en la capacidad del planeta para proporcionar alimentos, oxígeno, agua limpia, polinización y otros «servicios de ecosistema» de los que depende la vida.
