Cuando Almagristas dieron muerte a Francisco Pizarro
La relativa tranquilidad de Francisco Pizarro, a sus sesenta y tres años, se vio truncada el 26 de junio de 1541, cuando los partidarios de su rival, el difunto Diego de Almagro, irrumpieron en su recién estrenado Palacio de los Reyes de Lima y acabaron con su vida tras asestarle, “tantas lanzadas, puñaladas y estocadas que lo acabaron de matar con una en la garganta”.
Ese se considera el primer crimen en lo que hoy se conoce como Palacio de Gobierno. ¿Y cómo llegó a enfrentar a estos dos socios de La Compañía de Levante que buscaban explorar las tierras del Birú (Perú)?
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La revista Historia National Geographic, narra esta etapa de la conquista de estas tierras. Pizarro era el líder militar que sabía cómo enfrentarse al enemigo, Almagro era el encargado de reclutar a los hombres y organizar la intendencia de las tropas. Pizarro, gracias a las Capitulaciones de Toledo de 1529, recibió toda clase de títulos y de prebendas; mientras Almagro quedó siempre en un segundo plano.
La aparente cordialidad entre los dos hombres se rompió definitivamente cuando entró en escena el hermano mayor de Francisco Pizarro, Hernando. Las rencillas llegaron a la llamada batalla de Las Salinas en 1538, luego de la fracasada expedición de Almagro en tierras chilenas en 1936.
La sublevación de Manco Inca Yupanqui contra los españoles, hizo a Almagro ir a Cusco donde además de detener al sublevado, arrestó a dos hermanos de Pizarro, Hernando y Gonzalo. Pese a las promesas de Pizarro, envío a su hermano Hernando ya liberado a enfrentar a su exsocio.
En Las Salinas, Almagro fue ejecutado por Hernando Pizarro. Los almagristas, ya en la pobreza querían venganza. Durante la mañana del domingo 26 de junio de 1541, alrededor de una veintena de “almagristas” encabezados por Juan de Herrada, se dirigieron al palacio del gobernador Pizarro al grito de: “¡Viva el Rey y mueran los tiranos!”. Esa mañana Pizarro moría, sin antes matar a unos tres atacantes, con una estocada en la garganta.
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