13/11/2021 / Exitosa Noticias / Cultural / Actualizado al 09/01/2023
La escritora uruguaya Cristina Peri Rossi, la flamante premio Cervantes, fue una especial amiga del escritor Julio Cortázar, a tal punto que se le consideraba “un amor imposible”.
Peri Rossi había entrado como colaboradora al semanario español Marcha en 1970, tras obtener el premio de esa publicación por su novela El libro de mis primos. “Era una novela lírica y política (sigo pensando que todo es político, hasta no serlo) de mucha difusión en Uruguay”, recuerda al diario Clarín.
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En ese entonces recibió una carta de Julio Cortázar donde se declaraba admirador de su escritura después de leer un ejemplar de ese libro llegado en barco por azar a París. Ese fue el inicio de un vínculo entrañable -hecho de un amor raro, pasional de a ratos, sublimado casi siempre- que la flamante premio Cervantes mantendría con el autor de Rayuela hasta la muerte de él, en 1984.
Peri Rossi es lesbiana y ha vivido desde entonces en Barcelona.
De esta amistad escribió una memoir breve y encantadora: Julio Cortázar y Cris, publicado originalmente en Montevideo por Estuario editora, en 2014. “No he vuelto a París, como tú no has podido volver a Barcelona. Pero te cuento que nuestro restaurante favorito (el Amaya) sigue en las Ramblas, la Fundación Miró continúa con su olivo central”, le dice a su amigo en una carta incluida en el libro, escrita poco antes de su publicación.
Esa amistad estuvo hecha de cartas y complicidades. Los dos amaban la música en general y a Joan Báez en particular, los museos de arte, las ciencias ocultas (las llamaban “disciplinas oscuras”), la poesía y compartían una extraña fascinación por los dinosaurios mucho antes que Spielberg filmara Jurassic Park.
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La diferencia de estatura (ella tan menuda; el un gigante de casi dos metros) y la de edad (ella en sus treinta y él casi en sus sesenta) eran parte de una liturgia íntima y profana que usaban, claro, para reírse una vez más hasta de ciertos artículos de prensa que aseguraban que ella era su novia.
Con información de Clarín