OPINIÓN|Nicolás Lúcar:El mensaje de Pedro Aquino 'AQUÍ SÍ'

Pedro Aquino, futbolista peruano parte del extraordinario grupo humano que nos devolvió la alegría de lo que es ir a un Mundial de Fútbol, acaba de lanzar un video inspirador.Jugando con su apellido, Aquino, salió a la cancha con el nombre de Aquisí.“Salí a la cancha con una camiseta que decía Aquisí, en vez de Aquino. Lo hice porque quería darles un mensaje. Este año quiero que en Perú dejemos de pensar en lo que aquí no podemos hacer y empecemos a pensar en lo que aquí sí podemos lograr. Como cuando decían que aquí no había jugadores que dejaban la vida en la cancha. Y demostramos que aquí sí hay, y de sobra. O como cuando dijeron que aquí no hacíamos sentir la localía, y demostramos que aquí sí nos hacemos sentir. Aquí, allá y en todos lados”.

El vídeo de Aquino registra imágenes de éxitos deportivos y gastronómicos, pero también de las enormes marchas contra la corrupción y en defensa de las mujeres, porque al final todo es parte de lo mismo.“Nos dijeron que aquí no éramos capaces de levantarnos ante la adversidad. Y demostramos que aquí sí luchamos por cambiar nuestra realidad”.Haciéndonos recordar a los peruanos que tenemos demasiadas razones para estar orgullosos de lo que somos y de lo que podemos hacer cuando nos lo proponemos, Aquino dice: “Nos dijeron que no podíamos ser los mejores del mundo y demostramos que aquí sí podemos ser todo lo que nos propongamos”.Aquino termina convocándonos a que “este 2019 sigamos demostrando que somos incondicionales con nuestro país así como lo somos con nuestra selección, porque en Perú nos quedan muchos partidos por ganar en la cancha, pero sobre todo fuera de ella. Vamos Perú!”.

Con este simple mensaje directo al corazón, Aquino nos obliga a recordar que los peruanos somos más que nuestros políticos.Que vivimos en un país donde los expresidentes hacen cola para ir a la cárcel por corruptos y compiten entre ellos en ineficiencia, pero donde nuestras posibilidades son inmensas.El mensaje de este joven deportista nos debería obligar a todos a entender que lo que tenemos al frente no es solo la tarea de castigar a los que construyeron una perversa red de corrupción y desmontar ese sistema y crear los mecanismos para que nadie nunca más nos vuelva a robar, sino que tenemos que empezar a construir el país con el que todos soñamos.Es cierto que hay días en que la indignación y la desmoralización nos agobian, pero debemos recoger en esos momentos el poderoso mensaje de un joven deportista cuya propia vida es un mensaje.Somos un país rico por recursos naturales, por su historia, pero también, y sobre todo, por su gente.

Nos fallaron los dirigentes, nos robaron no solo el presupuesto de la República sino, lo peor, nuestra fe y nuestros sueños.Pero debemos mirar hacia adelante no con falso optimismo, sino con la convicción de que somos un país bendito y debemos dejar que la gente decente y emprendedora pueda dar todo de sí para transformar el Perú y ser lo que hace muchas décadas debimos ser, un gran país.