24/08/2021 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
El gabinete Bellido se presentará en el Congreso para solicitar el voto de confianza. Si revisamos la experiencia histórica, lo usual ha sido que el primer gabinete de un gobierno obtuviera el voto de confianza sin mayor dificultad en el periodo conocido como “la luna de miel” política (primeros 5-6 meses). Sin embargo, esta vez lo que hay es una luna de hiel como expresión del plan golpista fujimontesinista iniciado la noche de la segunda vuelta. Plan golpista que fue derrotado inicialmente a través de la movilización popular y ciudadana durante 43 días, al lograrse que el profesor Castillo fuese proclamado presidente de la República.
Actualmente, el plan golpista tiene como objetivo la vacancia presidencial. La palabra de la realidad revela que el verdadero objetivo no es Bellido ni uno ni otro ministro. Las acciones de la derecha (fujimorismo- Renovación fascista-Avanza País-PPC-APRA) lo confirman. En este contexto tendremos una nueva batalla política con la presentación del gabinete Bellido en el Congreso, el cual podría contar con el respaldo no solo de las dos bancadas de izquierda, sino también la de Somos Perú, AP y APP. O podría ocurrir que alguna(s) opten por la abstención, a la que se sumaría una parte de la derecha a fin de dilatar la decisión y presionar más al gobierno para que pongan ministros obsecuentes; o, según la evaluación de la situación, se la jueguen ya por la censura.
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Que la obtención del voto de confianza en el Congreso es importante, resulta obvio; aunque no hay que poner todos los huevos en una sola canasta, más aún, tratándose de un Parlamento que está dando malas señales: un congresista considerado miembro de los “gansters de la política” pasó de la detención domiciliaria a presidir una comisión en el Congreso; y el pésimo ejemplo de una parlamentaria que celebró su cumpleaños con una ostentosa fiesta sin mascarillas cuando se anuncia la “tercera ola”, lo que la convierte en persona no grata para la salud y la vida.
Por eso es muy importante el VOTO DE CONFIANZA POPULAR, reto principal del gobierno, ejecutando el Plan Bicentenario sin corrupción y concretando los anuncios del 28 de julio. Lo esencial es afirmar una visión integral del desarrollo y el buen vivir, ejerciendo nuestra libertad y soberanía, al servicio de la paz con justicia social, sin ceder a presiones para sustituir el Plan transformador por una “Hoja de ruta” o algo por el estilo; dejando claro que transitamos por la vía democrática y no por la del autoritarismo golpista ni de ningún tipo de terrorismo.
Corresponde al presidente liderar los cambios anhelados por las clases populares y medias, construyendo una clara mayoría social y política desde la ciudadanía, conformando un gran bloque representante del nuevo rostro social en la ciudad y el campo. Desde las calles, el jueves 26 debe darse el primer gran paso por la democracia y la gobernabilidad.
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