24/03/2021 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Todos nos imaginábamos, por lo prometido hace varias semanas, a nuestros chicos, en sus primeras clases para dominar sus Tablet, gran paso dado para avanzar, sobre todo ahora con esta enseñanza a distancia.
Los chicos, el año pasado, tuvieron muchos problemas. Demasiados contratiempos. Todos están de acuerdo que, la preparación, ante la pandemia, y las obligaciones sanitarias, todo se transformó en algo difícil y, esto aumentó cuando, técnicamente, no estábamos preparados para el aprendizaje de chicos y pudieran salir adelante.
Se anunció la llegada de la Tablet, esa computadora portátil de mayor tamaño que un celular con pantalla táctil con la cual sus usuarios pueden interactuar sin mouse y teclado. Pasaron los días. También las semanas, los meses, terminó el año sin que ellas aparecieran por alguna parte. Fue punto en contra para los responsables, y un punto muy adverso para los jóvenes, al carecer de algo muy útil para poder avanzar en sus aprendizajes.
Padres y apoderados protestaron. Hubo programas especiales en todos los medios de comunicación tocando el tema y, las explicaciones, sobraron. Todos, de uno y otro lado, hablaron. Unos criticaron. Otros prometieron cambios y que todo sería diferente. Se pidió además que, en todos los colegios las puertas estuvieran abiertas, con personal presente porque, las Tablet ya iban en camino y, estarían en todas las escuelas, al iniciarse el año escolar.
El francés Jules Renard decía que, “de vez en cuando, había que decir la verdad para que le creyeran cuando decía mentiras”. Se regresó a clases y, las promesas con fecha y todo, no se cumplieron. Los jóvenes vuelven, a iniciar el año escolar, con el marcador en contra. Pierden los educando. Pierden los maestros, perdemos todos. No más promesas en el aire. Las comunicaciones son lo que más importan y, lógicamente las Tablet, a las que se siguen esperando.
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