OPINIÓN | Miguel Humberto Aguirre: "Kun Agüero, cambió goles por lágrimas"
Emotivo, conmovido, sensible. Son expresiones aplicables al momento del adiós del Kun Agüero registrada, muy temprano para América, mediodía para Europa.
Se fue el delantero con solo 33 años, más de 400 goles, y luego de vestir cuatro camisetas como fueron las de Independiente, Atlético de Madrid, Manchester City y Barcelona actualmente.
La emoción postergó, por minutos, sus primeras palabras ratificadas con aspiraciones profundas, para poder contar, que la decisión ya estaba tomada hace días, cuando los médicos le ratificaron no haber superado el momento vivido en la cancha misma.
Reconoció haber tenido la esperanza de regresar a las canchas, pero “por algo pasan las cosas”. En las tribunas, en el momento de la despedida, todos los actuales compañeros del equipe Culé, sus entrenadores como Pep Guardiola, hinchas de todos los equipos defendidos. Su familia encabezada por su señora madre y sus hermanos. También un grupo de periodistas.
A una pregunta de lo ingrato, sucedido en su paso por las canchas, expresó “mejor es recordar lo positivo, Mi carrera me dejó cosas muy importantes. Muy útiles para seguirlas. Continuar con ellas”.
Como niño recordó que tuvo el sueño de jugar fútbol. Nunca pensó que podría llegar a Europa, y mirar el mundo en otra dimensión corriendo tras un balón. Agradeció a la vida y al balompié por dar a su vida otro camino. Reconoció llegar a un lugar nunca presente en sus sueños.
Dificultades para hablar por la emoción. Lágrimas, evocaciones y mucho pasado, en la mesa del adiós de un hombre ganador de partidos y muchos momentos de su vida. Todas las partidas son tristes. Esta no fue diferente. Del Kun Agüero ya hablaremos en ayer. En pasado.
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