OPINIÓN | Manuel Altamirano: Subcampeones de América y ahora qué...
El domingo todo el Perú vibró con un encuentro futbolístico, una final luego de 44 años que disputó nuestra selección, el equipo de todos; perdió ante el pentacampeón mundial, ante Brasil, donde el fútbol no es un deporte es una religión, pero se perdió dignamente y con la frente en alto, jugando. Me emocioné hasta las lágrimas, ya que fue la primera vez que vi a la selección jugar una final.
Para llegar a la final de la copa tuvimos que ganar a Chile, con quien tenemos una rivalidad que proviene de antaño, y se exacerbó en la década de los 70, hoy en día tenemos relaciones cordiales, incluso nuestro país alberga el 14% de las inversiones chilenas; la competencia de hoy en día no es deportiva y mucho menos armamentista, la competencia es acerca de qué país da las mejores condiciones para la inversión nacional e internacional, esa inyección de capital tan necesaria en la actualidad para que los países exploten de manera racional sus recursos naturales generando nuevos puestos de trabajo, manteniendo el ritmo de crecimiento y así tener mejores servicios públicos, ese es el partido que debemos ganar.
El sinfín de posibilidades que nos brinda la Alianza del Pacífico, iniciativa promovida por el entonces expresidente Alan García, que tiene por objeto integrar a Chile, México, Colombia y Perú con la finalidad de lograr una integración comercial entre los países de la Cuenca del Pacífico no ha sido explotada. Esta integración nos daría posibilidades de ser un país apto para captar un gran número de inversiones, no olvidemos que esta alianza tiene 40 observadores de 4 continentes. Recientemente se aprobó el ingreso de Ecuador como miembro.
Siguiendo en el tema futbolístico, hoy el Perú debe ganar el partido de atraer inversiones siendo más competitivos, mejorando los plazos, frenando la pérdida de casi 500,000 puestos de trabajo y que va en aumento, mejorar la seguridad ciudadana, comenzar a fortalecer las instituciones, sin injerencia del Ejecutivo en otros poderes, esas son las señales que debemos dar como país para volver a ser competitivos y comenzar a crecer. Quiero recordar el 21 de junio de 2011 (hace casi 8 años) con esta frase del expresidente García: “Cada año el Perú creció el doble que nuestro vecino, cada año el Perú redujo la pobreza más que Chile. Hoy Chile tiene 1% más de pobres, nosotros tenemos 17% menos de pobres (que hace cinco años). Estamos demostrando que en esta rivalidad de inteligencia y capacidad gana el Perú y ganará mucho más si nuestra juventud sigue estudiando y esforzándose”.
Siempre un gol a favor o en contra permite a uno u otro equipo manejar el partido, hoy el gobierno ha metido un gol al otorgar la licencia de construcción al proyecto Tía María, la de Islay, a la que en mi artículo anterior bauticé como “María Gallese” por lo maltratada que ha sido igual que el portero Pedro Gallese, hoy en día el héroe de nuestra selección, pero después del 5-0, más maltratado que piñata en cumpleaños. Pero el fútbol es así y la política también, ambos dan revanchas, somos subcampeones de América, empecemos a ganar inversiones. Tía María será ese gol a favor o en contra con el que plantearemos el devenir de los próximos años, que ojalá lo ganemos por una goleada de inversiones. Señor presidente que no le digan que use el VAR, puede cambiar de opinión, recordemos siempre que el Perú es primero.