OPINIÓN | Manuel Altamirano: "2.2% y hacia abajo"

Esta semana recordaba que al inicio del año se decía que nuestro crecimiento económico sería del 4.6%, pero a lo largo del año esta cifra se ha ido reduciendo hasta un magro 2.2%, que significa que hemos dejado de crecer 2.4% de lo proyectado, lo que se traduce en pérdida de empleos formales, aumento de la informalidad, mayor déficit fiscal, menor recaudación, entre otras consecuencias que afectan directamente a la gran empresa y al ciudadano de a pie.

No nos olvidemos que la bolsa de valores tuvo este año el mayor retroceso desde el 2017, donde muchos proyectos de inversión entraron en compás de espera, asimismo, el gasto público estará paralizado ya que la función pública ha sido criminalizada, lo que en buen cristiano significa que nadie firmará autorizaciones de gasto, pensando en qué procesos judiciales o administrativos podría tener a futuro, la consecuencia directa es el pobre nivel de gasto en los ministerios.

¿Qué hacer para reencaminar el crecimiento económico del país? es la gran pregunta y doy algunas ideas:

Es urgente una Ley General de Trabajo que ponga freno a los abusos laborales y la informalidad, como en el caso de los empleados de McDonald's, fallecidos por una negligencia, donde un funcionario del municipio dice que por ser una transnacional todo debe de estar bien. ¿Dónde estamos?, la muerte de estos jóvenes no debe caer en saco roto y debe servir para atacar el problema de fondo, necesitamos una Ley General de Trabajo actualizada que proteja al trabajador de los abusos. ¿Qué pasará ahora con McDonald's, si Domino's Pizza cerró por una cucaracha?

Es urgente que se fortalezcan las instituciones, puesto que sin instituciones sólidas y fuertes no habrá estabilidad jurídica, y sin estabilidad no llegarán las nuevas inversiones que tanto necesitamos.

El Ejecutivo debe de ordenar el gasto fiscal, es decir retirar paulatinamente los 500,000 trabajadores que han entrado a laborar al Estado de manera paulatina, además de reducir el gasto en consultorías y, como lo mencioné anteriormente, crear un gran centro estatal donde se realicen estas consultorías para que el Estado no tenga este sobrecosto.

Es importante también desarrollar, como política de Estado, que nuestros recursos naturales deban ser exportados con valor agregado, si no seguiremos vendiendo minerales como hace más de 400 años. Si antes recibíamos carruajes, armas, caballos, hoy debemos recibir computadoras, teléfonos móviles, televisores, alguna muestra de que fuera de nuestras fronteras les dan valor agregado a nuestros recursos y si nosotros no se los damos ese 2.2% que necesitan, seguiremos hacia abajo.