OPINIÓN | Lewis Mejía: En todo momento y en todo lugar
Un vehículo del servicio público interprovincial ingresa sorpresiva y estrepitosamente a la sala de espera de la terminal de autobuses en Lima Norte, y unos transeúntes resultan heridos por atropello.
¿Hubo alguna forma de prevenir ese accidente que felizmente no dejó mayores víctimas que lamentar? Probablemente sí. Tal vez la falla humana -un chofer cansado o distraído- o mecánica -frenos defectuosos-, que determinarán los expertos, pudo evitarse y no estaríamos escribiendo esta columna.
Una pregunta que nos hacemos es si las brigadas de seguridad actuaron rápida y oportunamente, y se siguieron los protocolos establecidos, como evacuar en forma ordenada, atender a los heridos con primeros auxilios, dar parte a las autoridades y evitar la presencia de curiosos.
Lo concreto es que inclusive estando sentado tranquilamente en un sillón puede ocurrirnos un accidente como el de la estación del bus. Todo eso nos motiva a estar siempre alertas en casa, en el trabajo, en un lugar público, y en realidad en todas partes.
Si vas al cine, a una discoteca o a comer en un restaurante, debes respetar el aforo -la cantidad máxima de personas en un local-, y estar atento a lo que ocurra a tu alrededor.
Debes preguntarte dónde están las puertas de evacuación y reconocer cuáles son las rutas de escape en caso de explosión, incendio o terremoto. Define por dónde vas a salir en caso de un incidente y trata de tener una vía alterna por si ocurre una obstrucción en las puertas principales.
Las mesas ubicadas cerca a la salida son las más seguras en un salón, según los expertos. De ser posible, prefiérelas frente a aquellas que están cerca de la cocina o en un rincón de difícil acceso. Si detectas un riesgo, habla con el administrador del local.
Debes tener los ojos bien abiertos en temas de seguridad. Si observas condiciones inseguras, como por ejemplo la acumulación de materiales inflamables, obstrucción de las escaleras y puertas de escape, o la presencia de conexiones eléctricas defectuosas, no ingreses a ese lugar y da aviso a las autoridades correspondientes.
Revisa tanto en casa como en tu centro de labores si las condiciones son seguras para las personas. Con frecuencia la respuesta es “sí, pero”, así que toma las medidas necesarias para mejorarlas. Coordina con la familia o los compañeros de trabajo y convoca a un técnico, nunca a un aficionado.
El accidente ocurrido en Lima Norte también debe ser un llamado de atención para las autoridades municipales, que tienen la función de verificar si los dispositivos de prevención de accidentes en los lugares públicos realmente están en capacidad de neutralizar los riesgos, o solo son para cumplir con la norma.
Finalmente, vamos con esta pregunta: ¿los pasajeros en la sala de espera en la terminal pudieron hacer algo? Claro que sí: estar atentos en todo momento y en cualquier lugar, y generar un cambio para mejorar la seguridad.