15/06/2019 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
La seguridad empieza por casa. Y si estás preparado ante una emergencia, las posibilidades de sobrevivir tú y tu familia, y de poco después iniciar una rápida recuperación, se incrementan.
¿Te has preguntado alguna vez qué vas a hacer en caso ocurra un sismo o terremoto? ¿Y si ocurre una fuga de gas o un incendio? ¿Estás listo tú y tus familiares ante estas amenazas?
La elaboración del Plan Familiar de Emergencia, diseñado por el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) necesita de la participación de todos los miembros de la familia: de papá y mamá, de los hijos grandes y chicos, de los abuelos, tíos, primos, y en general de todos los que vivan en la casa.
Todos deben conocer ese plan para saber qué responsabilidades o roles les toca cumplir en caso de una emergencia, como por ejemplo quién ayudará a salir -evacuación- a los adultos mayores o niños muy pequeños.
Todos debemos saber que las emergencias y desastres pueden ser originados por los llamados 'fenómenos naturales' o por la acción humana, y que no hay lugar en el mundo que esté libre de estos riesgos, por lo que es importante estar listo en todo momento y en todo lugar.
Tu Plan Familiar de Emergencia debe considerar la Preparación, que es lo esencial en caso de un desastre. También, la Respuesta, es decir saber cómo actuar ante un incidente. Y la Rehabilitación, que son los conocimientos y acciones que deben realizarse inmediatamente después de la fase de Respuesta.
Recuerda que cuando hablamos de “Peligro”, nos referimos a la probabilidad de que un evento potencialmente dañino, como un terremoto, por ejemplo, se presente en un lugar específico -en tu ciudad, en tu barrio, en tu vivienda- con cierta intensidad y por un periodo de tiempo definido.
La “Vulnerabilidad”, por su parte, es el nivel de susceptibilidad o sensibilidad que presenta ante la ocurrencia de un desastre, que puede afectar a las personas, a las edificaciones -la vivienda- o las actividades sociales y económicas afectadas por un peligro.
El “Riesgo”, por su parte, es la probabilidad de que tú, tus familiares, vecinos o compañeros de trabajo y estudios sufran daños y pérdidas a consecuencia de sus condiciones de vulnerabilidad y el impacto de un peligro.
Estos tres aspectos deben ser analizados en tu Plan Familiar de Emergencia, como un primer paso en el esfuerzo de estar en condiciones de afrontar un desastre y reducir o mitigar sus impactos sobre tu hogar y tu familia.