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OPINIÓN | Lewis Mejía: Los peligros de acumular inflamables

Materiales inflamables son, las rumas de papeles, las botellas, las llantas usadas, y hasta las sillas, los sillones y otros muebles viejos que ya no quieres usar.

Mejía
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30/03/2019 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023

Cuidado. La acumulación de materiales inflamables sin las medidas de seguridad puede convertirse en una verdadera tragedia con víctimas que lamentar.

Ocurre con frecuencia, cuando nos enteramos que un incendio arrasó con un depósito en algún sector de la ciudad, y puso en peligro a los vecinos de la zona.

Materiales inflamables son, por ejemplo, las rumas de papeles y cartones, así como las botellas y otros envases plásticos, las llantas usadas, y hasta las sillas, los sillones y otros muebles viejos que ya no quieres usar. Basta una chispa para generar un siniestro.

Con frecuencia, todo esto termina en el techo de la vivienda, donde además de generar un peligro de incendio se convierte en un factor de sobrepeso sobre la propia estructura de la construcción: otro riesgo en caso de un terremoto.

Pero también tenemos los depósitos clandestinos de material reciclable, donde además hay balones de gas deteriorados y otros productos o sustancias peligrosas que son verdaderas bombas de tiempo. ¿Qué podemos hacer?

Lo primero es empezar por casa. Organízate con tus familiares y vecinos para que juntos limpien los techos y retiren todo lo inservible e inflamable; y en coordinación con la municipalidad distrital llévarlos al depósito respectivo.

¿Y qué pasa si descubro que en mi barrio se levanta un almacén que no cuenta con autorización para guardar estos materiales? Tienes que avisar inmediatamente a las autoridades de Desarrollo Urbano, Defensa Civil o Fiscalización de tu respectiva municipalidad, y pedirles que tomen medidas.

Si se trata de un depósito donde se realizan actividades contaminantes, como la quema de productos o la generación de humos, avisa al Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) a los teléfonos 204-9278 y 204-9279, o al correo electrónico [email protected]

Si vives cerca de un depósito, formal o informal, debes organizarte junto a tu vecindario para solicitar las garantías a la municipalidad, y pedir que evalúen y tomen medidas ante los potenciales riesgos. Asimismo, retira los obstáculos de la calle para que en caso de emergencia puedan llegar los vehículos de los bomberos.

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