OPINIÓN | Lewis Mejía: Para evitar los incendios forestales
Las aterradoras noticias respecto a los grandes incendios forestales que están arrasando con una parte importante de la selva amazónica del Brasil y Bolivia, y que en sus avances parecen amenazar nuestras fronteras, nos mantienen en sobresalto.
Esto, a pesar que tales desastres ocurren en lugares muy lejanos de nuestra casa. Pero en realidad no es así. Los incendios forestales están más cerca de lo que parecen, y sus impactos nos afectarán tarde o temprano.
La buena noticia es que todos nosotros, de alguna manera, podemos contribuir a evitar estos fuegos sin control a través de sencillas recomendaciones que podemos aplicar, junto a nuestros amigos y familiares, cuando salimos fuera de la ciudad buscando el relax del campo.
Si vas de excursión por la carretera, no arrojes las colillas encendidas de los cigarrillos en el camino, y menos aún si estás atravesando una zona del bosque. Tampoco debes tirar las botellas de refrescos que usaste o los vidrios rotos, pues podrían iniciar el fuego a partir del efecto lupa con los rayos del sol.
Encontrarse con la naturaleza puede ser una buena solución ante el estrés del trabajo diario. Pero si te vas de campamento, trata de evitar encender fogatas, pues una chispa o las cenizas prendidas pueden ser llevadas por el viento y provocar un gran incendio kilómetros más allá.
Si de todos modos quieres disfrutar de la experiencia de prender una fogata, o elaborar una parrillada, asegúrate que al terminarla todo quede completamente apagado. Lo más sencillo es arrojarle agua o tierra a los leños y las cenizas. ¡Y no las soples! Podrías avivar el fuego y generar un incendio forestal.
Evita dejar productos inflamables cuando termines de acampar, como papeles, cartón o plásticos (bolsas y botellas). Separa y luego introduce la basura que has producido, incluyendo los restos de comida y otros desperdicios, dentro de unas bolsas. Luego, ciérralas herméticamente y llévatelas.
Más tarde deberás dejarlas en un tacho o en el basurero autorizado, jamás abandones basura en el campo o tirada a un costado de la carretera. ¡Y nunca quemes la basura...!!! Los gases y humos son altamente tóxicos y pueden afectar tu salud y la de quienes te rodean.
De igual manera, guarda cuidadosamente los líquidos inflamables, como el alcohol, la gasolina o el kerosene, en envases herméticos y con tapa rosca, para evitar que se derramen y enciendan por acción de los rayos del sol.
Recuerda que, bajo ciertas condiciones de calor y alta temperatura, como por ejemplo en el intenso verano, estacionar tu auto con el motor encendido sobre un sector de la hierba seca también podría ocasionar un incendio.
Y si a pesar de todas estas recomendaciones, el fuego escapa de tu control, no lo dudes y pide ayuda inmediatamente. Deja las cosas que te impidan escapar y trata de ponerte a salvo dirigiéndote a un lugar seguro en el sentido contrario al viento. Avisa a las autoridades o administradores del lugar.
Jamás te quedes callado. La mayoría de incendios forestales empezaron así, como un accidente o un descuido. Recuerda que tú también puedes hacer algo concreto para evitarlos.