27/07/2022 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
La general Laura Richardson, una oficial con algo de aire a lo Jane Fonda, es la primera mujer de tener a su cargo las operaciones de Estados Unidos en América Latina. Hace días lanzó un mensaje donde llamaba la atención de los países del Patio Trasero sobre la presencia de China y Rusia en el sub continente.
Incluyó en su comentario una alusión a la “amenaza para la democracia” que representan los países que acogen a estos nuevos socios comerciales, cuyo interés principal son las materias primas. La frase clave de su discurso trasmitido hasta por Tik Tok (red de propiedad China) la jefa del Comando Sur también puntualizó una preocupación estratégica adicional: “esta región es muy rica en recursos naturales como Tierras Raras, el Triángulo del Litio (Bolivia, Chile, Argentina y metiéndose por la ventana, Perú)”.
Allí puso en perspectiva su mensaje sobre la democracia. EEUU amarra democracia con recursos que son vitales para el desarrollo de autos eléctricos, industria aeroespacial, informática y celulares de alta potencia.
Además, son empresas norteamericanas las que son las mayores concesionarias de Litio en Chile, un buen punto de partida para el control futuro del Triangulo del Litio. Gabriel Boric está barajando dos ideas: poner el Litio bajo el control de una empresa estatal similar a la exitosa CODELCO y está considerando la posibilidad de poner a funcionar, además, un proyecto transnacional andino de explotación del “oro blanco” que agruparía a Bolivia, Chile, Argentina y Perú.
La general Richardson, de manera muy clara, está diciendo que esto no le conviene a EEUU, que quiere ser socio de un proyecto sin los chinos y rusos, sus mayores pesadillas geopolíticas en el Litio abren importantes posibilidades para los países con mayor cantidad de yacimientos, el Perú tiene solo 800,000 TM del mineral, mientras Bolivia posee 21 millones de TM, Argentina 18.3 y Chile 9.6. Chile está a la vanguardia y es el segundo productor en todo el mundo.
Este breve discurso de la general Richardson tiene un impertinente tonito intervencionista al unir la democracia con el amor al Litio. Lo mejor es que el Triángulo del Litio se convierta en una Unión Comercial, solo de países de América Latina, que negocie con todas las naciones, como ha propuesto el presidente Boric.
Lo que los países con Litio debemos reiterar es que no queremos ser una cancha de los conflictos geopolíticos del mundo. Manan.
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