Opinión | Jorge Solís Espinoza: Impulsa Perú, una burla a las Mypes
En el país, a decir de Daniel Hermosa, director de Mypes Unidas del Perú, existen 5.5 millones de micro y pequeñas empresas, de las que 2.5 millones son formales y 3 millones informales. Estimación no muy próxima a la realidad. Veamos, según el INEI el año 2019, la población en edad de trabajar era de 24 millones. El sector informal de la economía se ha incrementado a 85% como consecuencia de la crisis originada por la pandemia, lo que nos permite colegir que las mypes informales alcanzarían los 7 millones.
El otrora programa Reactiva Perú alcanzó a 492,768 Mypes; de manera que su impacto ha sido ínfimo frente al universo de estas empresas, originando que cientos de miles salgan del mercado, incrementándose alarmantemente los niveles de pobreza y extrema pobreza, lo que significa una regresión histórica de 20 años en términos de desarrollo humano y económico, ello gracias a la miopía del gobierno que mira con desdén a este sector que es el colchón de la economía, el desarrollo económico se construye desde la base de la pirámide. Para ponerle la cereza al pastel, recordemos que de los S/. 57,883 millones de reactiva Perú, S/49, 643 beneficiaron a empresas de medianos y grandes activos.
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Es imperioso que el gobierno escuche el SOS de las Mypes e implemente un programa de rescate financiero de S/ 15,000 millones destinadas a capital de trabajo (REACTIVA MYPE), con garantías del Estado de 100% e interés subsidiado en 5% (caso Colombia), que les permita acceder a financiamiento con tasas equivalentes a las que recibieron las grandes empresas y corporaciones de 1.5%, las microfinancieras que asisten a este segmento no pueden cargar los sobrecostos. Asimismo, el financiamiento debe comprender un período de gracia de 3 años y con plazo de 7 años, medidas de contingencia para evitar que caigan en default.
Las políticas contra cíclicas aconsejan la expansión del gasto público. Este no es momento para equilibrar la economía, se trata de evitar su desplome. La misión del FMI que hace un tiempo atrás visitó al Perú, recomienda poner énfasis en el gasto público, por los graves efectos sociales de la crisis.
Finalmente, se requiere un programa de fortalecimiento de las microfinancieras que son el brazo financiero de las Mypes, para seguir impulsando la inclusión financiera, no olvidemos que solamente el 6% de las Mypes tiene acceso a servicios financieros.
El programa impulsa Perú, propuesto por el Ejecutivo, es de escaso o nulo impacto por estar acotado a 147,000 mypes, lo que en buen romance significa mendrugos. ¡ES COMO DARLE DE COMER A UN ELEFANTE UN ATADO DE RABANITOS!
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