16/06/2019 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Si la política peruana se sostiene del hambre de poder basado en la seguridad de los elegidos, cómo se preocuparán en poner fin al hambre, generar seguridad alimentaria y promover la agricultura sostenible.
En política prevalece lo no estructurado, no rutinario y turbulento. Donde la labor de las autoridades de paso y la estructura burocrática existente (enquistada) solo busca hacer el mínimo esfuerzo.
Hoy tenemos ministerios divorciados (no articulados) donde cada quien hace lo que quiere; la falta de políticas nacionales que fuercen a buscar el beneficio de los peruanos ni la sostenibilidad del país. Es la típica imagen del ingenio truncado por la transitoriedad del cortísimo (y personal) plazo y la escasez de análisis basada en conocimiento y amor por el Perú.
Debiera existir coordinación apropiada entre el gobierno central, los gobernadores, alcaldes provinciales y distritales. Desde la existencia de la Ley de descentralización les corresponde a los representantes de cada departamento invertir en Agricultura. Es penoso reconocer que a la fecha ellos solo le asignan en promedio el 2 % a agricultura. Así no llegarán a buen puerto, porque fomentan el incremento de la pobreza y el mal manejo agrícola.
Poco interesa que el impacto de la agricultura, la ganadería y lo forestal genere el 7 % de los alimentos que día a día nos llevamos a la boca, que aporte más del 5 % al PBI, que esté en camino a representar el 10 % de las exportaciones (más importante después de la minería) y sobre todo, que de trabajo a un tercio de la población peruana. Todo ello en un Perú que tiene 84 de los 117 ecosistemas del mundo, que posee 28 de los 32 climas del mundo, donde exigen 650 especies de fruta y 1408 plantas medicinales.
Se debiera trabajar en una cultura agrícola, ganadera y forestal, con un DNI que identifique a los peruanos dedicados a nuestra alimentación, generando un sistema agrícola basado en tecnología, trabajo de campo y semillas apropiadas. Que el ministerio priorice los cultivos y cadenas de valor, coordinadas con los gobernadores y alcaldes, a fin de determinar las etapas de pre producción, producción, transformación y comercialización de los productos que generen valor a cada departamento del país.
Trabajen y apliquen el plan estratégico de desarrollo nacional, tal cual establecido en la norma existente. Piensen fuera de la caja que acarrean, dejando de lado la pesada mochila llena de conocimientos inapropiados. Recuerden que, en la vida, en las organizaciones y en el Estado, solo se cosecha lo que se siembra.
La sostenibilidad del sector depende de la gracia de sus miembros.