OPINIÓN | Jaime O. Salomón: empoderar a la mujer desde el emprendimiento
Mujeres y hombres son el elemento fundamental en la búsqueda de plataformas para dar solución a los problemas del país, teniendo como meta una economía basada en el conocimiento e innovación, con accesos igualitarios y con libertad para decidir sobre su propio cuerpo.
El cuerpo de la mujer no debe ser violentado y agredido y ello se hace posible con el empoderamiento en varios niveles: social, cultural y económico, el desarrollo de capacidades, así como dar continuidad a las incursiones pioneras de las mujeres en el ámbito público.
Debemos crear conciencia sobre la lejanía existente del estado, las inequidades que reproducen las barreras de acceso a la educación, la discriminación, las desigualdades de poder entre hombres y mujeres, así como la desprotección y desbalance existentes aún en el siglo XXI. El empoderamiento es imprescindible y la innovación saludable cuando existe igualdad de oportunidades y libertad de pensamiento.
Una escena que he visto repetida en mi experiencia como profesor universitario son jóvenes mujeres en las aulas de pre y posgrado, quizá sin reparar que su sola presencia es muestra de una de las transformaciones sociales más importantes en los últimos dos siglos. Otra es la propia discriminación de la mujer por la mujer, cuando segrega al sexo opuesto.
El acceso al conocimiento a través de la educación ('el acceso al mundo de la escritura') ha pasado de ser algo excepcional a ser algo más bien cotidiano en nuestro país. Haciendo historia, Trinidad María Enríquez fue la primera mujer, cusqueña y peruana, en ingresar en 1875 a la Facultad de Jurisprudencia; Clorinda Matto de Turner, otra ilustre cusqueña y escritora indigenista, fundó en 1892 la imprenta llamada “La Equitativa” gestionada únicamente por mujeres, y que tres años más tarde sería destruida en coincidencia con el inicio de la República Aristocrática Peruana (1895). Ellas, entre otras, reconocieron la igualdad que ambos sexos deben mantener.
Garantizar el empoderamiento y valoración de las mujeres pasa por disponer de una visión de igualdad, con familias cariñosas, con apropiada alimentación y salud, educación de primer nivel, ganas de trabajar duro para alcanzar los objetivos, la eliminación de toda forma de violencia contra la mujer, y el reconocimiento que tanto mujeres como hombres, competentes, somos seres humanos que marcaremos el camino para un país desarrollado, coexistiendo dentro del mismo planeta llamado Tierra.
Trabajemos por el Perú.