OPINIÓN | Jaime O. Salomón: "Ajuste para sobrevivir"

El mundo atraviesa una fuerte crisis de salud y los efectos económicos y sociales ya están atacando a los ciudadanos de la Tierra. Si no cambiamos o ajustamos nuestra vida y los productos y servicios que brindamos al mercado, seguiremos siendo como el patio trasero. Solo sobrevivirán los que cambien hábitos y costumbres.

Hoy muchas personas y empresas están paralizadas y es de esperar que lo estén hasta inicios de junio, fecha en la que empezarían a soltar las restricciones de a pocos.

¿Qué podrían hacer los informales (73 % de la fuerza laboral), los independientes, las personas que brindan servicios, las micro y pequeñas empresas? donde muchos han tenido que paralizar operaciones y servicios?

Una gran oportunidad ante la crisis es el encierro forzado y el haber dejado de trabajar. Y una opción de salir adelante es el pensar en generar innovación desde adentro para no perder presencia en el mercado.

Se llama intra-emprendimiento: crear nuevos negocios dentro del existente. Se requiere optimismo, apertura, convicción, dinamismo, creatividad, liderazgo, cambiar de mentalidad y cierta dosis de aburrimiento de las personas que hacen nacer la nueva idea. Se trata de repensar los procesos actuales y hacer destrucción creativa, es decir, identificar el qué las hizo exitosas y “desarmar” todas las actividades mototaxistas y procesos actuales, encontrando la opción de mejora o adaptación de alguno de ellos y, reconstruirlos.

Es una operación quirúrgica que requiere que la persona que lo hace conozca muy bien su negocio. El generar cambios requiere no tenerle miedo al fracaso; y eso es posible si realmente conocemos el negocio e identificamos las opciones de mejora de los productos o servicios actuales o, desarrollamos una nueva idea que amplíe la posibilidad de atención a los clientes.

Ello porque los clientes apreciarán las soluciones nuevas si es que resuelven sus problemas. Que predominen las alianzas y amistades sobre las diferencias, enemistades y rivalidades. Es decir, una vez re-analizada nuestra vida y negocio, pensemos en la opción de juntarnos con otras personas o empresas para que elaboremos nuevas ideas de negocio, en función a la suma de individualidades.

Sirvamos los unos a los otros con apertura del corazón; entendamos que el mundo no será igual y deberemos aprender a vivir en sociedad, con igualdad y a crecer como personas. Trabajemos por el Perú.