16/12/2018 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Por Giancarla Di Laura Morales / investigadores y critica literal
El viernes 14 de diciembre ocurrió en España un evento largamente esperado: la reconstitución del legendario Movimiento Kloaka, que causó escándalo en los años 80 con su discurso irreverente y su cuestionamiento del estado de cosas en el país. Los que vivieron aquellos años recordarán la violencia, la corrupción, la hiperinflación, la inseguridad ciudadana y el caos general que se vivía en la sociedad peruana.
Levantando la negra bandera del anarquismo, cuatro poetas jóvenes, entre ellos Roger Santiváñez, fundaron en setiembre de 1982 este grupo que se declaró una “conciencia vigilante” de lo que pasaba en el país. Luego se incorporaron otros poetas y hasta un pintor, y juntos realizaron diversas performances en lugares tan disímiles como el bar “La Catedral” en la Plaza Unión y el Auditorio Miraflores. Les interesaba renovar la poesía peruana desde una perspectiva joven sin caer en el adocenamiento de los poetas de las generaciones anteriores.
Mucha agua bajo el puente
Kloaka pasó por varias etapas, pero quizá el momento definitorio fue la división del grupo cuando cuatro de sus miembros (Guillermo Gutiérrez, Julio Heredia, Mariela Dreyfus y Mary Soto) fueron “expulsados” en enero de 1984 por los otros miembros debido a su falta de compromiso con el Movimiento y por su inconsistencia en mantener una línea de trabajo que requería de su plena participación. Los que quedaron (Santiváñez, José Alberto Velarde, Domingo de Ramos, Edián Novoa y los “aliados principales” Dalmacia Ruiz-Rosas y José Antonio Mazzotti) se reconstituyeron en una “Instancia Suprema” que significó la renovación del Movimiento en una segunda etapa mucho más politizada, en la que se escribieron algunos de los manifiestos más urticantes del Movimiento.
Pero han pasado muchos años y los poetas de Kloaka se dispersaron desde mediados de ese año 84. Luego el 2012 hubo celebraciones por los treinta años de su fundación, pero el fervor ya no era el mismo.
Desde Madrid y París
Sin embargo, con motivo de la visita a Madrid de José Antonio Mazzotti y José Alberto Velarde, se ha relanzado el Movimiento Kloaka en su faceta internacional, ya que ambos poetas viven en el extranjero desde hace varias décadas. Planean por lo tanto seguir sirviendo de puente entre las aspiraciones de los nuevos poetas peruanos y su recepción internacional, que suele ser casi nula.
Así como Velarde fue instrumental en la presentación el mismo viernes 14 de diciembre de la compilación El Zorro y la Luna, poemas reunidos 1981-2016, de José Antonio Mazzotti, premiado este año con el prestigioso galardón José Lezama Lima de Casa de las Américas en Cuba, también lo será para publicar desde París las breves plaquetas tituladas “Kloaka Internacional” que dieron vida en los 80 a los primeros libros de Domingo de Ramos, Rodrigo Quijano y otros poetas jóvenes de entonces. Ahora se trata de difundir lo más valioso de la nueva poesía peruana en un contexto extranjero cada vez más reacio a las humanidades. Nuevamente son los propios poetas los que defienden la continuidad de este arte.
Advertidos están, pues, vates peruanos. Kloaka vuelve con fuerza y sin perder su sentido crítico.