Columnistas

OPINIÓN | Edhín Campos Barranzuela: Extorsión y sicariato a la venezolana

La migración venezolana ha traído consigo delincuentes de alto vuelo y por sus formas, modo y ejecución de sus actos ilícitos, estos son muy violentos.
SMP
17-09-2019

Mucha alarma y preocupación viene causando en todo el Perú el incesante incremento de la ola delictiva y esta cifra se ve agravada por la migración venezolana, por el arribo de organizaciones criminales, lo que demuestra que nos encontramos viviendo tiempos violentos.

Indudablemente, uno de los principales problemas que tenemos en todo el territorio patrio es la inseguridad ciudadana, pues la delincuencia ha llegado a tocar fondo y al mes ocurren un promedio de 36,000 delitos y de acuerdo a la Dirección de Tecnología de la Información y Comunicación de la Policía Nacional, cerca de 50 personas son víctimas de la comisión de varios delitos cada hora.

Eso significa que a cada minuto se estarían produciendo diferentes hechos punibles en el país, lo cual es altamente tóxico.

Las cifras de la criminalidad se han disparado en los últimos años, al parecer producto de la migración venezolana y consigo también han venido integrantes de presuntas organizaciones criminales como 'El Tren de Aragua' y 'Los Gatilleros de la Guaira'.

La semana pasada el país amaneció con una macabra noticia, los medios de comunicación social daban cuenta del vil asesinato y descuartizamiento del venezolano Rubén Matamoros Delgado y su amigo el peruano Jafet Caleb Torrico Jara, en el Hostal Señor de Sipán, en San Martín de Porres.

Según se ha dado cuenta, el médico forense a cargo de revisar los restos descuartizados, ha precisado que ambas víctimas han ingerido alcohol y las diligencias preliminares determinarán si se buscó emborracharlos para quitarles la reacción y así acabar con ellos.

Toda esta situación permite indicar que corresponde a la Policía Nacional a través de la Policía de Homicidios y también al Ministerio Público, realizar una correcta investigación preliminar para identificar al o los presuntos autores de este execrable hecho punible, además determinar los móviles de este homicidio calificado.

Determinar si este luctuoso hecho se realizó por ferocidad, codicia, lucro o por placer. O conforme lo establece el artículo 108 del Código Penal, se realizó para ocultar o facilitar otro, o por su modo de ejecución, fue con gran crueldad y alevosía, o por el medio empleado se perpetró para poner en peligro la vida, la salud de otras personas.

De la misma forma, corresponde saber a los investigadores, si detrás del asesinato y descuartizamiento se encuentran organizaciones criminales dedicadas a la extorsión y el sicariato y verificar si están enviando señales de la comisión de estos delitos graves para advertir su poder y supremacía en el mercado delictivo.

Asimismo, no debemos perder de vista que, según fuentes de la Policía Nacional, la migración venezolana ha traído consigo delincuentes de alto vuelo y por sus formas, modo y ejecución de sus actos ilícitos, estos son muy violentos. Se necesita realizar una correcta investigación criminal a fin de que estos luctuosos hechos no queden impunes, que se investiguen, se juzguen y sancionen como corresponde, dentro de la garantía constitucional de un debido proceso.

Por lo que no debemos perder de vista, que muchos compatriotas, inicialmente recibieron con beneplácito la migración venezolana, ahora se precisa que debe regularse su ingreso, pues se les ha dado la oportunidad de trabajar en circunstancias en que su país vive momentos difíciles, es por ello que la hospitalidad peruana demanda que sea retribuida con un buen comportamiento y no se violente nuestro ordenamiento jurídico con esta clase de horrendos crímenes, toda vez que nuestro país necesita progreso, bienestar, respeto y también seguridad ciudadana.