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OPINIÓN | Dennis Falvy: Sigue el tira y afloja

La guerra comercial entre Estados Unidos y China inició en marzo del 2018.
exportación
12-09-2019

El blog urgente 24 aduce , que Bloomberg refiere que Trump quiere reclamar una cuantiosa deuda de la época pre comunista que los chinos tienen con inversores norteamericanos. Ello generado en 1913, antes de la Revolución Bolchevique en Rusia y mucho antes del comunismo y llegada de Mao Zedong (Mao Tse Tung).

La guerra comercial entre ambos países , se inició en marzo del 2018 y Biejing decidió atacar la última ronda sobre aranceles chinos , colocando los propios por US$ 75,000 millones a productos norteamericanos.

A favor de China , están las “Tierras Raras”; 17 elementos esenciales para la producción de alta tecnología , como baterías de autos, eléctricos y aparatos electrónicos o fabricación para la defensa militar y hasta la producción de energías renovables.

Eso explica el por qué Trump intentó comprarle Groenlandia a Dinamarca. Ello a pesar de que China lidera esos elementos con un 70% de la producción mundial.

El blog señala que Bloomberg explica que quien tiene poder sobre la guerra comercial y los mercados internacionales, son el Presidente Trump; el secretario el Tesoro Steven Munchin y el de comercio Wilbur Ross; quienes se reunieron con los tenedores de estos bonos. De ello se tiene información que uno de ellos vendidos a China fue utilizado para financiar la construcción del ferrocarril al mismo estilo de Inglaterra y la Argentina del siglo XX.

Jonna Blanco, uno de esos tenedores de bonos, le dijo a Bloomberg que China estaría en un “incumplimiento selectivo” ya que cuando fue el momento de comprarle Hong Kong a Gran Bretaña, en época de Margaret Tatcher, China le pagó la deuda a los ingleses sin ningún tipo de queja . Y esa deuda, asegura Blanco ,eran de mayor antigüedad que la de los EEUU. Y, ello pondría a ese país en una posición complicada internacionalmente.

El reclamo es muy complicado y podría llegar a una situación límite, como es el peligro que corre la economía norteamericana , aunque Trump lo niegue del todo.

Y ello porque China no es el único que no pagó deudas y que se desentendió de los negocios pasados y correspondientes a otra era del país.

Pese al optimismo en los medios por la reanudación de los negociación entre ambos países en el mes de octubre y que se espera haya un diálogo fructífero y encaminado; esto , señala el blog en referencia, puede cambiar en un solo instante. Y ello genera más incertidumbre.