03/02/2020 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Hay analistas que advierten que los mercados están a punto de caer nuevamente, pues los balances de los principales bancos centrales se han contraído el año pasado.
Jesse Felder dice que las condiciones de liquidez globales se han estrechado drásticamente gracias a la política de los centrales más estricos. Didier Saint George acota que los QE hicieron la delicia de los inversores, pero en el año 2018 esto amainó y hubo el intento de la Fed de vender sus compras anteriores al mercado. Pero eso cambió por condicionantes políticas, básicamente.
Un artículo de Michael Howell, señala al mismo estilo del asesor Carville de Clinton, que es la liquidez estúpidos el problema.
El presidente de la Fed, Jay Powell, ha demostrado flexibilidad por lo acontecido el año pasado en el mercado de repos, lo que impulsó al banco central a inyectar USD 400 mil millones en el sector financiero, advirtiendo que esto no era un QE4; pese a que en el 4to trimestre el balance de la Fed aumentó en un 10% y se compró letras del tesoro.
El caso es que los bonos a 10 años bajaron, las acciones de riesgo subieron y el oro asimismo se despuntó.
La liquidez, como se sabe, va a los bancos, repos y mercados swaps.
Los libros de texto se supone explican todo el devenir de esto, pero el mundo ha seguido adelante.
Debemos pensar en los sistemas financieros occidentales como esencialmente mecanismos de redistribución de capital, dominados por estos gigantescos grupos de dinero que se utilizan para refinanciar las posiciones existentes, en lugar de recaudar dinero nuevo.
El propio nuevo gasto de capital se ha eclipsado por la necesidad de repasar enormes cargas de deuda.
Los niveles de deuda mundial equivalen a un enorme 320% del PBI mundial y el doble del fondo de USD 130 trillones de liquidez mundial.
En consecuencia, se necesita más liquidez para refinanciar esta deuda. Es decir QE5, QE6, QE7 serán necesarios.
Y, es que la experiencia histórica enseña que la liquidez en abundancia es mala. Pasó en el año 1974, 1987, 2000 y en 1989 en Japón.
Las medidas de la FED son a inflar esa liquidez y todos felices y contentos. Pero un CEO de Citigroup, Chuck Prince, dijo que todo iba OK en los inicios del 2008 y que se estaba en realidad bailando en la fiesta. Gocen del baile, señala Michael Howell el crítico acérrimo y acota: pero cerca de la puerta de salida.