04/07/2019 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Se dice que el dinero es cobarde, pues huye en cuanto le entra un poco de miedo. Asimismo, se señala que los bolseros huyen en estampida cuando se oye que la cosa viene complicada.
Sea esto cierto o no y con tanta electrónica de por medio en tiempo real, tomo nota que en el mercado europeo el miedo a equivocarse con las expectativas, como antaño, ha provocado una fuerte venta de fondos de acciones en el pleno tirón alcista de los mercados desde enero y el acumularlo en bonos.
Es gracioso el leer que ello es OK para la bolsa, como señala un gurú español al cual sigo hace años. Lo gracioso es su explicación:
"Porque, casi siempre, hace lo contrario del rebaño, de la mayoría”. ¿Le creemos?
Es cierto que hay reducción del PBI europeo, pero el BCE ha aclarado que seguirá con tasas cero o negativa y aumentará nuevamente la oferta de dinero con un nuevo Qe si es necesario.
En Estados Unidos, el crecimiento sigue fuerte y aunque las cifras de empleo no vuelven a sorprender con alza, no están nada mal y tal vez por ello Trump salió con el pie en alto en la reunión del G 20 en Osaka Japón y señaló ante la sorpresa de muchos asistentes que:
“Casi todos los países se aprovechan de EE.UU., incluyendo a la Unión Europea que nos trata peor que China. Y sobre China ha dicho que se está viniendo abajo”. Sin embargo, luego levantó el veto a Huawei.
El caso es que la palabra recesión, no obstante, se ha instalado en la mayor parte de los informes de situación y estrategia".
En los mercados hay suspicacias. Los Organismos Supranacionales como el FMI, Banco Mundial, Agencias de Calificación, analistas, fallan en sus previsiones macroeconómicas, lo que ha acarreado enormes tensiones interpaíses y con las empresas afectadas.
Y qué sucede si se retrasa de nuevo la época de vacas flacas. ¿Es que el susto del año pasado en Wall Street sigue latente?
La política monetaria a principios de 2019 en respuesta a una ralentización de la economía global ha llevado a un giro en la demanda por parte del inversor de fondos de bolsa a fondos de bonos, explica Bernard Delbecque, director senior de Economía y Análisis de EFAMA.
El dinero huye de los fondos de Bolsa y se agolpa en los de bonos cuya rentabilidad enfrenta tasas negativas y espera que suba la inflación.
Todo un cambalache financiero.