03/12/2019 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
El PBI, antes de su vigencia y popularidad para incorrectamente medir bienestar, era representando por el PNB; es decir, el Producto Nacional Bruto, el que explícitamente excluía la producción de empresas residentes extranjeras y agregaba las nacionales que se producían en el exterior. El PBI, contrariamente, contiene las extranjeras en el suelo patrio y excluye las de afuera. Es por ello que la cuenta de Renta de Factores de la Balanza de Pagos es una a observar si esta crece para auscultar cuánto dinero se llevan estas a su país o a terceros lugares por producir; en este caso, en el Perú.
El PBI nos distrae. Por ejemplo, la Presión Tributaria que se señala es de 14.2%; esto subestima en el numerador a los tributos. No están allí los municipales, los especiales mineros, las contribuciones a la seguridad social y, asimismo, las AFP; amén de que asimismo no se toma en consideración los “gastos tributarios”. (https://www.expreso.com.pe/opinion/jorge-baca-campodonico/presion-tributaria-esfuerzo-fiscal-e-informalidad/).
Comparar esa tasa sub estimada, en general para lo que pagan las grandes empresas y traen a colación países europeos con presión tributaria alta, es un despropósito, en tanto muchos de ellos tienen excelente retorno, al menos en salud, educación, seguridad y carreteras a sus contribuyentes.
El paroxismo es lo que reclaman las Clasificadoras de Riesgo para darnos el grado de libertad; vale decir, un máximo del 30% entre la deuda pública del gobierno y el PBI. Al ser este USD 220,000, lo máximo para ellos es nada menos que USD 66,000 millones, por lo que la frase preferida de los macrobúhos es que estamos muy poco endeudados.
Pero ojo, pare, cruce y tren. Se ignora olímpicamente por un lado los USD 33,554 millones de deuda del sector privado residente que figura semanalmente en la nota BCRP, cuadro 110.
Aquí no acaba la cosa. El Consejo Fiscal advirtió que había una deuda tripartita pública del Estado. Y ella era la previsional, la relacionada a avales de las APP y un rubro de contingencias que se estimaba en unos USD 10,000 millones.
La sorpresa me la llevé cuando, el 15 de noviembre, un semanario político y que le da tanda a todo el mundo, hizo un buen post y puso que parte de esas contingencias eran de USD 5,264 millones de arbitrajes al Ciadi por 10 empresas lo que podría crecer más, si no se da el OK a Tia María. Interesante que se despabilen.