Un segundo embarazo tiene menos complicaciones si ocurre tres años después del primero

Aunque todos los embarazos tienen sus particularidades, dejar un periodo de dos a tres años entre la primera y la segunda gestación reduce las posibilidades de tener complicaciones, dijo Enrique Guevara, gineco obstetra y director del Instituto Nacional Materno Perinatal (INMP) del Ministerio de Salud (Minsa).

“El espacio entre dos embarazos debería ser, como mínimo, de dos años, porque lo ideal son tres años, ya que es el tiempo que el cuerpo demora en recuperarse. En ese tiempo, la madre tiene que dar de lactar a su primer hijo y tiene que alimentarse bien. Además, durante el parto, la madre pierde sangre y requiere de uno a dos años para recuperar lo perdido en el parto, que usualmente no pasa de medio litro”, explicó.

Agregó que todos los cambios vuelven a su estado normal en un año y medio, pero si la madre tuvo una cesárea, es mejor esperar dos años para que la herida esté bien cicatrizada.

RIESGOS DEL PRIMER EMBARAZO

Si bien todos los embarazos tienen algún riesgo de desarrollar preeclampsia, la posibilidad se incrementa en las madres primerizas y en las mujeres mayores de 35 años, especialmente si son proclives a tener hipertensión.

“Ahora, si en el primer embarazo hubo preeclampsia, hay altísimo riesgo de volverla a tener”, agregó el especialista. También comentó que, la cesárea en el primer embarazo eleva el riesgo de tener hemorragia en el próximo parto. En estos casos, el médico recomendó que la gestante se atienda en un hospital antes que en un centro de salud de primer nivel.

Para evitar cualquiera de estas complicaciones, Guevara recomendó a las gestantes estar alertas ante señales inusuales como sangrado, contracciones antes de los nueve meses o dolores de cabeza con anomalías en la visión.

“Ninguna gestante debería de sangrar, eso es primordial. Tampoco debería de tener contracciones con barriga dura antes de los nueve meses, eso es un riesgo de parto prematuro”, advirtió. En estos casos, se aconseja acudir inmediatamente al establecimiento de salud.