Terremoto en Pisco: Hoy se cumplen 16 años del sismo de 7.9 grados que ocasionó más de 500 muertos
Hoy se cumplen 16 años del movimiento telúrico que provocó la muerte de 500 personas. El 15 de agosto de 2007 Ica registró un terremoto de 7.9 grados que afectó a las provincias de Pisco, Chincha y Cañete.
El peor de este siglo
Eran las 6:40 de la tarde del 15 de agosto del 2007 en todo el Perú cuando ocurrió el mayor desastre en lo que va de este siglo. Un movimiento de 7.9 grados destruyó las provincias de Pisco, Ica, Chincha y Cañete llevándose a 596 vidas, más de 400 mil damnificados, según las cifras oficiales.
En Lima también se sintió el gran movimiento telúrico que afectó el sur de la capital, en varios distritos se fue el fluido eléctrico y era imposible acceder a llamadas telefónicas porque las principales redes cayeron en su totalidad.
Las autoridades de ese entonces declararon en estado de emergencia a las provincias afectadas por un plazo de 60 días. El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) asumió las acciones de ayuda logísticas, con el apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú (PNP) para atender los llamados de auxilio.
Unidos para ayudar
Ante esa terrible situación, toda la población peruana se unió para realizar donaciones y ser voluntarios para tratar de reconstruir casas, iglesias y "familias". Empresas privadas, organismos particulares e instituciones educativas como universidades públicas y privadas fueron promotores de dicha iniciativa.
La solidaridad de los peruanos se concentró en el Estadio Nacional, donde miles de personas acudieron al llamado de auxilio, esto obligó a habilitar nuevos centro de recepción. Por ello, municipalidades, parroquias, organizaciones religiosas pusieron a disposición sus inmediaciones para recibir también las donaciones respectivas.
Otras ciudades en hacer llegar su ayuda fueron Arequipa, Moquegua y Tacna por encontrarse cerca de la zona del desastre. También Cusco, Piura, Chiclayo, Huaraz, Chimbote y Trujillo organizaron donaciones. Esta contribución logró recaudar medicamentos, ropa, carpas, alimentos, donaciones de sangre, dinero, útiles de aseo, pilas, entre otros.
Por otro lado, los consulados de Perú en el extranjero abrieron cuentas bancarias para facilitar el envío de ayuda a través de dinero en efectivo. Asimismo, se facilitó el acopio de bienes de primera necesidad para ser enviados a las zonas afectadas.
Esta tragedia es la peor registrada en lo que va de este siglo, el terremoto de 7.9 grados que destruyó Pisco nos deja una gran lección: siempre estar preparados para afrontar estos desastres naturales que nunca avisan cuando llegarán.