19/01/2019 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 09/01/2023
La explosión de una toma clandestina en México suma ya 67 muertos y 75 heridos siendo una de las peores tragedias en décadas y reflejando el problema del robo de hidrocarburos, que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha prometido seguir combatiendo.
"Aunque duela mucho, tenemos que seguir con el plan de acabar con el robo de combustible y con estás prácticas. No vamos a detenernos", dijo este sábado el mandatario en una rueda de prensa.
El viernes en la tarde, un grupo de pobladores del municipio de Tlahuelilpan, en el céntrico estado de Hidalgo, reventó un ducto de hidrocarburo y empezó a sustraer, de una forma muy rudimentaria, la gasolina.
Tras unas dos horas, y pese a la presencia del Ejército que poco pudo hacer para controlar la tunda de centenares de personas que se acercaron a recoger gasolina, una explosión arrebató la vida a 67 personas, mientras que 75 continúan heridas, alguna de gravedad.
"Las llamas estaban consumiendo todo lo que había alrededor y había personas fallecida y quemadas", describió hoy el gobernador estatal, Omar Fayad.