SJL: Madre de taxista denuncia que policías asesinaron a su hijo y exige justicia
Exige justicia. Entre lágrimas, Cirila Soldevilla denunció que su hijo Miguel Ángel Oré Soldevilla, quien se desempeñaba como taxista, fue asesinado la madrugada del lunes por policías, durante una intervención en San Juan de Lurigancho.
Precisó que su hijo, en aparente estado de ebriedad, se dirigía a ofrecer servicio de taxi a un amigo, cuando fue intervenido por los efectivos. Y al no detener su vehículo, terminó baleado por la espalda.
Cirila Soldevilla sostiene que, antes de salir de su vivienda, Miguel Ángel se encontraba "descansando" tras acudir a la fiesta de cumpleaños de su suegra, donde había ingerido bebidas alcohólicas.
"Mi hijo estaba durmiendo, estaba descansando y eran las 11 de la noche. Pero un amigo lo llamó para que le haga una carrera de taxi. Él salió y a 30 metros de mi casa estaban los policías. A mi hijo le dijeron que se detenga, y él no se detuvo, seguía manejando. Entonces agarraron sus armas y empezaron a disparar a las llantas del carro. ¿Por qué tenían que disparar al cuerpo, si ya habían baleado las llantas? A quemarropa le dispararon por la espalda, dos balazos", relató en declaraciones a Exitosa.
Agregó que su hijo no intentó atropellar a uno de los policías. "Hay testigos, hay videos que han filmado los vecinos. Mi hijo no es un delincuente, es un chico sano, trabajador (...) Los policías dieron su versión pero a su manera, con hechos que no son ciertos", señaló.
"Estoy indignada. Los policías están para proteger, no para matar. Mi hijo no tiene antecedentes, por favor ayúdenme. ¿Por qué tenían que disparar al cuerpo? Lo han asesinado", añadió.
Cabe indicar que, en el cruce del jirón Mancheros y la avenida Wiesse. Miguel Oré recibió la señal de alto de los suboficiales Edson Alvarado Valle y Jorge Casas Villegas, ambos de la comisaría de Santa Elizabeth. Fuentes policiales precisaron que "se observan maniobras temerarias a excesiva velocidad, haciendo el chofer caso omiso a la orden policial, emprendiendo la huida".
La persecución se extendió hasta el cruce de las vías Republicana e Ingenieros, donde el vehículo conducido por el taxista chocó contra la pared de una casa y luego con unas rejas.