OPINIÓN| Nicolás Lúcar: Mensajes del referéndum
Ayer ganó Martín Vizcarra.Sí, es verdad, ayer ganó el Presidente de la República. Para empezar, porque se hizo el referéndum que él propuso contra lo que pretendía la mayoría del Congreso que finalmente se rindió ante él.En segundo lugar, porque la gente optó masivamente a favor de la fórmula de votación que Vizcarra proponía.El SÍ, SÍ, SÍ, NO fue abrumador. Según las cifras a las que tengo acceso al momento de escribir esta columna, más del 85% lo respaldó en las 3 primeras votaciones y por encima del 90% en la cuarta.Considerando el alto nivel de desinformación que ha existido para este referéndum sobre el contenido preciso de las reformas constitucionales, ha sido una cuestión de confianza, tan de moda últimamente, sobre la palabra del presidente lo que ha estado finalmente en juego.La gente le ha creído que era urgente cambiar el Consejo Nacional de la Magistratura por una nueva Junta Nacional de Justicia.La gente también ha votado por el control del financiamiento de los partidos políticos.
Los ciudadanos han decidido que no haya reelección de congresistas, lo cual era absolutamente previsible por el total descrédito de los miembros del Parlamento.Finalmente, y pese a que fue propuesta originalmente por el propio Vizcarra, la restauración de la bicameralidad fue rechazada a pedido del mismo presidente, quien objetó la versión final del texto salido del Congreso para ser votado ayer y que, según él, distorsionaba la propuesta. Y, una vez más, la gente le creyó. Pero aquí habría que agregar que esta propuesta, desde un comienzo, no era precisamente popular, ya que si la gente aborrece el Congreso actual, difícilmente estaría dispuesta a aceptar un Parlamento multiplicado a dos cámaras.
Pero ayer no solo fue una victoria de Vizcarra, sino una derrota de sus enemigos.La votación en el referéndum tiene que ser leída también como un rechazo a Alan García, que desesperado por la inminente confesión de Jorge Cuba, acusa al gobierno de perseguirlo. El expresidente tuvo que llevar una portátil para protegerse del rechazo de la gente a la hora de votar, mientras que por esas paradojas de la vida, José Domingo Pérez, uno de sus supuestos perseguidores, era tratado como héroe y aclamado en su centro de votación.
También fue una derrota del fujimorismo, que ya no puede seguir pretendiéndose la primera fuerza política del país, cuyos más connotados líderes llamaron a votar cuatro veces No, y que deberían ir tomando nota de cuán representativa es su mayoría actual en el Congreso. Rosa Bartra llegó a decir que le sorprendía lo desconectado que estaba Martín Vizcarra de los sentimientos de los peruanos. Me imagino que habrá reflexionado anoche sobre sus palabras.El referéndum ha sido una estocada a la legitimidad del Congreso y ha provocado que Víctor Andrés García Belaunde, un congresista en ejercicio, escriba en su Twitter: “...el gran derrotado es el Congreso y en especial la mayoría que lo gobierna. ¿Con que respaldo político y autoridad moral continúa? Debemos autodisolverlos y llamar a nuevas elecciones”.Vayan tomando nota.