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27/02/2025 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 27/02/2025
El Perú atraviesa la peor crisis de inseguridad ciudadana de su historia reciente. De acuerdo a datos del Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef), el país reportó 325 personas fallecidas por homicidio. La ciudadanía exige medidas inmediatas para dar vuelta a la alarmante situación, que se cobra casi seis vidas diarias.
En medio del caos, el titular del Ministerio del Interior (Mininter), atraviesa una investigación de la Fiscalía de la Nación por el presunto delito de abuso de autoridad y una posible moción de censura, la cual busca ser presentada formalmente por la congresista de la república, Susel Paredes (Bloque Democrático Popular).
Incremento de la violencia
Según las cifras del Sinadef, la tendencia de violencia nacional va al alza. El año 2024 marcó un punto de quiebre en la cantidad de asesinados, ya que pasó los dos mil. Estos dos primeros meses del presente año se ha mantenido el patrón. Cabe precisar que Juan José Santiváñez asumió el sector en mayo de, precisamente, el año pasado.
En el año 2021, el país registró 1.317 ciudadanos fallecidos por homicidio (no se contemplan los accidentes de tránsito en ningún caso); en el 2022, la cifra ascendió a los 1.516; y en el 2023, terminó en 1.506. Pese a estas cifras, siempre en el rango de 1.300 a 1.600, el año 2024 presentó un incremento exagerado: fallecieron por asesinato hasta 2.056 peruanos.
Lo peor, según el exministro Carlos Basombrío, es que la cifra contemplada por el Sinadef suele ser menor que la verdadera, ya que los equipos médicos no cuentan con los elementos suficientes para garantizar que una muerte es asesinato en todos los casos. Además, la página actualiza las cifras constantemente.
Moción de censura
Ante tal situación, la población exige ruidosamente la salida de Santiváñez del Ejecutivo. De acuerdo a un sondeo de Datum, solo el 6 % de la población defiende la gestión del ministro, mientras que casi el 90 % desea su destitución. Al respecto, la congresista Paredes acusa al funcionario de hacer lobby para que los legisladores no firmen su moción de censura.
"El ministro del Interior tiene mucho poder para apoyar comisarías regionales, para acelerar investigaciones. Yo he hecho mi trabajo de recoger las firmas y él ha hecho su trabajo de lobby, consiguiendo congresistas que no quieran firmar o que, habiendo firmado, retiren sus firmas", señaló en Canal N.
La acusación no ha sido tomada de buena manera por algunos parlamentarios. Sin embargo, de los veinte congresistas con los que se ha reunido en el año, dieciocho no han firmado la moción.