Miedo por derrumbes en la Costa Verde
Después de los tres derrumbes registrados ayer, se habla de un precario equilibrio geológico en los acantilados de la Costa Verde.
La caída de piedras y arena fue tan fuerte que rompió las mallas de seguridad, lo que obligó al cierre del tránsito vehicular entre la avenida Sucre y la bajada Bertolotto, dijo el jefe de la Policía de Tránsito, Jorge Lam.
Esta vez no hubo víctimas humanas, pero debemos estar alerta de lo que ocurra en este perfil costero de irresistible encanto, que da a Lima el título de ser “la única capital sudamericana en ser bañada por el mar”.
Desde hace mucho los técnicos dicen que las erosiones tienen que ver con el peso de los edificios construidos en los acantilados, situación que se puede complicar por la ocurrencia de temblores, los vientos y la dejadez de las autoridades.
Como precaución, el tránsito fue restringido, aunque en la tarde se reabrió pero con las disposiciones y desvíos para garantizar la competencia ciclística de mañana, con motivo de los Juegos Panamericanos.
Derrumbes
El primer derrumbe ocurrió muy cerca a la bajada de la avenida Sucre, en el distrito de Magdalena. Posteriormente, minutos antes de las 10 de la mañana, se registraron otros dos deslizamientos que bloquearon tres carriles de la ruta con dirección de Chorrillos al Callao.
A poco de ocurrir la emergencia, el alcalde de Lima, Jorge Muñoz, se hizo presente en el lugar y su primera explicación fue que las geomallas ubicadas en este sector no pudieron amortiguar la caída debido al gran volumen de material que se desprendió.
La alerta se encendió y desde la madrugada se apreció a personal de serenazgo y de limpieza orientando, los unos a los conductores, y los otros tratando de despejar la vía.
Muñoz Wells se comprometió ante la prensa a “garantizar la estabilidad del acantilado”.
Por su parte el burgomaestre de Magdalena del Mar, Carlomagno Chacón, con una rapidez que sorprende -y de la que no se puede dudar- dijo que tras el derrumbe de piedras y tierra se están evaluando las licencias de construcción de los complejos habitacionales construidos en las zonas de los deslizamientos.
Otra vez
Lo ocurrido ayer obliga a recordar la serie de estudios realizados en torno a este atractivo natural y que desde hace muchos años recuerdan en la franja de acantilados han sido construidos 85 edificios de más de diez pisos “que miran al mar”.
Un informe de 2017 publicado en un diario capitalino detalla que la Costa Verde “actualmente puede estar soportando unos 2,80 millones de toneladas de peso”.
Ahí, en el informe, se preguntan, ¿el acantilado soportaría todo el peso en caso de un sismo de gran magnitud?
Siguiendo el hilo de los estudios geológicos, realizados por expertos del Centro Peruano-Japonés de Investigaciones Sísmicas y Mitigación de Desastres de la Universidad Nacional de Ingeniería, una franja de entre 30 a 60 metros del acantilado sería vulnerable a los desprendimientos.
Hipotéticamente, un sismo de 8,5 grados provocaría el desprendimiento de un bloque, de una franja del acantilado; debido a la presión del peso que ejercen sobre ella los edificios, aparte de otras grandes infraestructuras construidas en el lugar.
Tragedia pudo rondar carrera por Lima 2019
La competencia de ciclismo de ruta programado para este sábado 10 de agosto en el marco de Lima 2019 se mantiene a la misma hora y en el Circuito de Playas de la Costa Verde.
Así lo confirmó el comité organizador de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019 tras el deslizamiento ocurrido en la madrugada en un sector de la Costa Verde correspondiente a Magdalena del Mar.
En un comunicado, el comité organizador explicó que -en coordinación con Panam Sport, la Municipalidad de Lima y la Policía- se modificarán la partida y llegada un kilómetro hacia el sur para garantizar la seguridad de los atletas y los espectadores.