FMI ajusta a la baja crecimiento de la economía mundial en 2019
El Fondo Monetario Internacional (FMI) presentó las nuevas proyecciones de crecimiento para la economía mundial en el 2019 y la ubicó en 3.5%, lo que representó una caída de 0.2 puntos porcentuales respecto a las estimaciones de octubre de 2018 (3.7%).
En la presentación del informe Actualización de Perspectivas de la Economía Mundial - Enero 2019, realizada en la víspera en la ciudad de Davos (Suiza), se explica que la economía mundial continúa expandiéndose, pero en algunas de ellas el crecimiento en el tercer trimestre fue 'decepcionante'.
Detalla que los pronósticos de crecimiento mundial se revisaron a la baja, en parte, a raíz de los efectos negativos de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, debido a los aumentos de aranceles entre ambos países.
Agrega que si bien el anuncio efectuado el 1 de diciembre sobre la suspensión de los aumentos de los aranceles por 90 días en la disputa comercial entre Estados Unidos y China es una noticia positiva, el posible resurgimiento de las tensiones en el segundo trimestre empaña las perspectivas económicas mundiales.
“Los riesgos para el crecimiento mundial se inclinan a la baja. Un recrudecimiento de las tensiones comerciales que vaya más allá de lo contemplado en el pronóstico sigue siendo una importante fuente de riesgo para las perspectivas”, señala el informe.
Caída para América Latina
El organismo internacional también redujo la proyección de crecimiento económico para América Latina en el 2019 pasando de 2.02% a 2%, debido principalmente al desempeño de México, Venezuela y Argentina.
Explicó que la caída de la inversión privada en México impactará en su PBI y solo crecerá 2.1%, frente al 2.5% estimado en la proyección de octubre de 2018. Para Venezuela se espera una contracción aún más severa de lo previsto y Argentina registrará una caída de 1.7%.
El dato
Debido a que el ímpetu ya no se encuentra en su punto máximo, existen riesgos para el crecimiento mundial inclinados a la baja, y en muchos países existe un margen limitado de maniobra para la aplicación de medidas, el FMI indica que las políticas multilaterales y nacionales deben centrarse urgentemente en evitar una mayor desaceleración y en reforzar la resiliencia.