14/12/2018 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 09/01/2023
Han pasado dos años desde que Melanie, la jovencita de 15 años que perdió la vida luego de una penosa agonía provocada por el impacto de una llanta que salió disparada de un vehículo que, pese a no encontrarse en óptimas condiciones, tenía aprobado el certificado de revisiones técnicas. Su padre, Luis Olivera, denunció que malos jefes policiales han convertido estas certificaciones en un negocio rentable y que tienen vínculos con el MTC y Sutran.
En diálogo con Nicolás Lúcar a través de la plataforma radio-televisión Exitosa, reveló que “hay dos jefes de la Policía que tienen plantas cuando eso está prohibido; ¿dónde estamos?, se preguntó al señalar que las revisiones técnicas están a cargo de un club de amigos, cuñados y primos. “Estas empresas pueden intervenirse, fiscalizarse y cerrarse, pero al día siguiente se abren con otro nombre pero en el mismo local; porque aquí se sabe quiénes son los dueños”, precisó.
Comentó que en su larga lucha por alcanzar justicia, conversó con el ex director general de la Dirección de Transporte Terrestres del MTC, Paul Concha, de quien dijo que está involucrado, vinculado con las empresas de revisiones técnicas; “él las defiende, hace las normas, yo fui a hablar con él, fui a increparle y no hizo nada, lo único que hizo Sutran es cerrar Retegen y ya están operando, con la misma gente”, añadió.
“Yo invoco a las autoridades para que se haga justicia, mi expediente está pasando de la fiscalía al juzgado, dicen que notifican a las personas implicadas pero nunca van, cambian de fiscal. Hubo un peritaje de parte que me costó bien caro, la jueza Carolina Huamán dice que hay obstrucción a la justica y falsedad genérica. Le pido a la fiscal Rosa Contreras que ya acuse, que no demore más”, invocó Olivera.
EL DOLOR NO ACABA
El 4 de diciembre de 2016, Melanie Castillo y dos amigas caminaban por una calle de Los Olivos, cuando en su camino se cruzó el irresponsable chofer Víctor Chumbe Chipana, al timón de una antigua camioneta que dos días antes había obtenido su certificado de revisión técnica. “Mi bella nos ha dejado un vacío tremendo, ella era el centro de nuestras vidas”, agrega consternado el padre, Luis Olivera.