18/04/2020 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 09/01/2023
Cuando llegó al hospital en una provincia de China, debido a una potente fiebre y una áspera tos, los médicos temieron lo peor. Dos días después, las pruebas confirmaron que efectivamente, el hombre de 86 años, y de quien no se ha revelado la identidad, era un paciente más del coronavirus.
Su avanzada edad lo hacía un paciente a considerar debido a que la COVID-19 ataca con severidad a la gente de la tercera edad. No obstante, ese no era el único problema. El octogenario sufría de 13 enfermedades crónicas, en las que se incluían hipertensión, diabetes, pancreatitis e insuficiencia renal, entre otras.
En China, las cifras cuentan que del gran número de víctimas el mayor porcentaje es de gente anciana. Tan así que de 100 pacientes, 15 pierden la vida. Por ello, el paciente del Hospital Universitario de Jianghan tenía todas las de perder.
A pesar de que no hay un tratamiento específico para el nuevo coronavirus, según un artículo de los 5 médicos chinos que atendieron a este paciente, y que fue remitido a la revista científica de la Asociación Internacional para Estudios de Cáncer de Pulmón, se utilizó una asociación de un medicamento para combatir la infección, otro contra el virus en sí y un tercero a base de corticoide (metilprednisolona).
Afirman que este último fue utilizado para evitar lo que se llama "tempestad de citocinas”, que es una reacción exagerada de defensa del cuerpo para combatir el patógeno. Esta respuesta del mismo organismo, ha sido una de las causas de muerte de pacientes (principalmente los jóvenes) de coronavirus.
Además de ello, al paciente de 86 años también se le inyectó inmunoglobulina, producida a partir del plasma sanguíneo de otros donantes y utilizada para fortalecer el sistema inmunológico.
Hay que indicar que en China este último es uno de los tratamientos experimentales más prometedores en la lucha contra el coronavirus, sin embargo, es justo que precisar que no hay pruebas a ciencia cierta que indique que estos medicamentos lograron que el octogenario le gane la batalla a la pandemia, o si fue una reacción de su propio sistema de defensa.