01/12/2024 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 01/12/2024
La famosa banda de cumbia peruana, Armonía 10, vive momentos de tensión. En la tarde de este 1 de diciembre, el bus de la agrupación fue atacado por extorsionadores, quienes dispararon dos veces contra el vehículo pensando que los integrantes se encontraban en su interior. Felizmente, los músicos seguían dentro del hotel, preparándose para un concierto, y ningún trabajador del transporte resultó herido.
El grave incidente ha hecho que diversos usuarios pongan en tela de juicio la continuidad de las actividades de la agrupación musical, por lo que su mánager, Agustín Távara, se pronunció a la prensa acerca de los futuros conciertos, presentaciones y eventos del aclamado grupo.
"Nosotros vamos a seguir con nuestras presentaciones, pero tendremos que tomar medidas de seguridad. Vamos a optar por incrementar la seguridad, tener dos carros (de seguridad). Vamos a tener que volvernos un poco antipáticos; el público piensa a veces que lo hacemos por divos y no es por eso", comentó el profesional.
Pide comprensión al público
Távara señaló que, si bien son una empresa de artistas y deben mantener una proyección adecuada con el público, la peligrosa realidad que afronta el país los obliga a tomar precauciones, así estas no sean las que gustarían. En ese sentido, indicó que algunos fanáticos pueden tomar a mal que los miembros de la banda vayan con seguridad a todo sitio, pero no tienen otra alternativa ante los recientes hechos.
"Quiero que entiendan que somos una empresa de artistas musicales y nos debemos a la proyección con nuestro público. No queríamos que el público nos vea con seguridad porque luego pueden opinar "¿estos qué se creen?", pero lamentablemente lo vamos a tener que hacer por un tema de seguridad. Espero que la gente entienda", comentó.
Cuarenta familias dependen de la banda
De igual manera, el mánager de la agrupación cumbiambera hizo énfasis en la necesidad de seguir trabajando para poder pagarle a las familias que dependen del grupo. Según declaró, más de cuarenta familias se ven beneficiadas de forma directa con sus conciertos, entre técnicos, transporte, profesionales de contabilidad, fotógrafos, entre otros.
"Tenemos que seguir trabajando porque de nosotros dependen cuarenta familias. Si no trabajamos, cuarenta familias no tienen músicos, choferes, seguridades, luminotécnicos, gente de contabilidad y administración...", precisó.
Por último, señaló que al momento del ataque, los dos choferes y un técnico se encontraban al interior del bus, pero felizmente no sufrieron daño alguno.