Abuelita devota del Señor de los Milagros SE QUIEBRA al pedir a Dina Boluarte ser honesta: Más honradez
En el marco del primer recorrido del Señor de los Milagros, una fiel devota aprovechó el evento religioso para dirigirse a la presidenta Dina Boluarte, exigiendo mayor empatía hacia los problemas del país. La mujer expresó su preocupación por los niños, ancianos y las crecientes dificultades que enfrenta el pueblo peruano.
Abuelita manda mensaje a Dina Boluarte
Durante la emotiva procesión del Señor de los Milagros, una de las festividades más importantes en Perú, una feligresa lanzó un mensaje directo a la presidenta Dina Boluarte y a los congresistas, pidiendo que "se pongan la mano al corazón" y actúen pensando en el bienestar del pueblo.
La mujer, visiblemente afectada por la situación del país, mencionó la necesidad de atender a los sectores más vulnerables, como los niños y los ancianos.
"Hay muchos niños de hambre, hay muchas personas ancianas de la tercera edad que no tienen familia, que no tienen para comer, pero ella parece que no le importan esas cosas", afirmó la devota.
El mensaje de la feligresa no solo fue un llamado a la presidenta, sino una voz que representa el clamor de muchos ciudadanos que sienten que las necesidades del pueblo han sido ignoradas.
"Ella tiene que ayudar a las personas. Al pueblo tiene que darle la mano; tiene que ser honesta. Que haya más honestidad y más honradez, porque todas esas personas que están en el poder parece que lo han perdido; ya no tienen sentimientos, no tienen corazón", recalcó.
Procesión del Señor de los Milagros
El Señor de los Milagros, que cada octubre recorre las calles de Lima, simboliza no solo devoción religiosa, sino también una oportunidad para que los fieles eleven sus preocupaciones ante las autoridades.
En esta ocasión, el primer recorrido del 2024 está siendo acompañado por miles de personas que se congregaron para rendir homenaje al Cristo de Pachacamilla, mientras algunos, como la devota que se dirigió a Dina Boluarte, aprovecharon el evento para manifestar su inquietud por la situación del país.
La procesión comenzó con la salida de la venerada imagen desde el Santuario y Monasterio de las Nazarenas, en el centro histórico de Lima. En medio de oraciones y cánticos, la multitud seguía el avance de la imagen por las estrechas calles de la capital.
Este recorrido, tradicional cada año, se convierte en un momento de profunda reflexión para muchos peruanos, quienes buscan consuelo y esperanza en su fe.
El primer recorrido del Señor de los Milagros en Lima, el 5 de octubre, fue un momento de devoción religiosa y de expresión de preocupaciones sociales y políticas. Una feligresa pidió a Dina Boluarte actuar "pensando en el pueblo", convirtiendo la procesión del Cristo de Pachacamilla en un espacio de reflexión.